메인메뉴 바로가기본문으로 바로가기

2022 WINTER

La traducción cultural pasa a primer plano

La narrativa de una serie es básicamente la historia de la vida de las personas, un retrato de la vida cotidiana. Pero algunos contextos narrativos de ese retrato son difíciles de transmitir por la traducción. Los fans globales de los K-dramas muestran curiosidad sobre el estilo de vida de los coreanos que reflejan esos contextos, y eso requiere de una meticulosa traducción cultural.

Poster con los personajes principales de “Extraordinary Attorney Woo”, quizá el K-drama más exitoso de 2022 en términos de audiencia y presencia social.
© ASTORY



“Extraordinary Attorney Woo”, que emitió el canal ENA entre junio y agosto de 2022, se convirtió en un éxito mundial al entrar en Netflix. Igual que la mayoría de los programas cuyos derechos de emisión compra Netflix, inicialmente este K-drama salió solo con subtítulos. Sin embargo, ante las persistentes solicitudes de doblaje de los espectadores de habla inglesa, Netflix lanzó con retraso una versión doblada al inglés.

La traducción en sí es a menudo un proceso laborioso, pero una línea de esta serie resultó particularmente difícil, la típica autopresentación de la protagonista Woo Young-woo: “Mi nombre es Woo Young-woo, leído tal cual o al revés. Gi-reo-gi, to-ma-to, S-wi-ss, in-do-in, byeol-ttong-byeol, yeok-sam-yeok. El nombre del personaje “Woo Young Woo” es un palíndromo: una palabra, frase u oración que se lee igual hacia adelante o hacia atrás. Palabras como “tomato” y “Swiss” son palíndromos en coreano, pero no en inglés.

Esta autointrodución de Woo Young Woo, una abogada genia con autismo, es tan conocida y simbólica que hubo que cuidar bastante su traducción. Tras mucho deliberar se tradujo como “Kayak, deed, rotator, noon, racecar. Woo Young-woo y cívico”. En lugar de traducir palabra por palabra del coreano original, seleccionaron cuidadosamente otros palíndromos en inglés considerando el contexto cultural. Sue Ann Pien, actriz con espectro autista, fue elegida como actriz de voz para el personaje principal.


La diferencia entre “extraño” y “especial”
Si el bufete de abogados de Woo no hubiera estado en la estación de Yeoksam, probablemente no figuraría en su presentación. Pero como la protagonista tiene una estrecha gama de conexiones sociales, la zona no es simplemente el lugar de su oficina, sino una parte muy importante de su vida. Esa estación se ubica en Gangnam, distrito que alberga al grupo demográfico más acaudalado de Seúl, a muchas importantes corporaciones coreanas globales, y a grandes firmas de abogados. El bufete ficticio de Woo, Hanbada, es uno de los principales bufetes de Corea y, por eso que esté ubicado en Yeoksam-dong resulta muy creíble. Un detalle tan aparentemente trivial, en verdad es un importante elemento que realza el realismo de la serie.

Al aumentar la popularidad mundial de los K-dramas, cada vez es más importante que las traducciones reflejen fielmente los matices subyacentes y la vida cotidiana de los coreanos. Esto ha generado conciencia sobre la importancia de ofrecer traducciones culturales con un alto grado de calidad y precisión. Traducir es mucho más que convertir palabras del idioma de origen al idioma de destino. Deben considerarse muchos factores, incluidos los matices de las palabras, como refleja la traducción del título “Extraordinary Attorney Woo”. Una traducción literal del coreano sería “Extraordinaria abogada Woo”, pero la palabra “extraordinaria”, que significa inusual, extraño o singular, no describiría adecuadamente el carácter de Woo. Es una razón de peso para traducirlo como “extraordinaria”, que connota algo especial o excepcional.

Actores de doblaje en inglés para “Extraordinary Attorney Woo” en Dubbing Brothers, un estudio de Burbank, California, en agosto de 2022. Para hacer justicia al original, eligieron actores asiáticos conocedores de la cultura coreana.
© Cine21

 



Universal pero distinto
Dirigida por Hwang Dong-hyuk, la serie original de Netflix de 2021 “Squid Game” se convirtió en una sensación mundial, en gran parte por su representación de la distinción cultural. La trama gira en torno a 456 adultos que, en un giro irónico, arriesgan sus vidas para competir en una serie de juegos infantiles coreanos para ganar un gran premio en efectivo: 45.600 millones de wones (33 millones de dólares). Algunos de esos juegos existen en otros países, pero la mayoría son distintivos de Corea, como el desafío dalgona (o ppopgi), donde los jugadores deben tallar una forma en un dulce de azúcar coreano tradicional sin romperlo. Este juego era nuevo para los espectadores extranjeros, al igual que el juego del calamar.

En una escena concreta, el protagonista Seong Gi-hun (interpretado por Lee Jung-jae) compra una botella verde de soju (licor destilado) y fideos en una tienda 24 horas, que luego consume en la mesa de afuera. Eso llamó la atención de los espectadores extranjeros sobre las tiendas de conveniencia coreanas, y sobre esa “botella verde”. Esa escena es casi un elemento fijo en dramas y películas coreanos, pero los espectadores internacionales lo ven como algo singular de la cultura coreana, especialmente porque algunos países prohíben la venta de alcohol a partir de ciertas horas o su consumo en espacios públicos.

“El orgullo de Ssangmun-dong, el genio Cho Sang-woo de SNU” es una frase que se oye con frecuencia en “Squid Game”. Ubicado en Gangbuk, un distrito al norte de Seúl, Ssangmun-dong se considera un vecindario de nivel medio, especialmente al compararlo con el Gangnam más próspero. Esta línea define al personaje de Cho Sang-woo, criado por una madre soltera que trabajó arduamente como pescadera para brindar a su hijo su mejor oportunidad de triunfar en la vida: graduarse en la Universidad Nacional de Seúl (SNU), una universidad de primer nivel en Corea. También resume algunos problemas complejos de la sociedad coreana, como la difícil situación de los vendedores del mercado tradicional, expulsados por las grandes tiendas; la noción de que ir a una universidad prestigiosa garantiza la movilidad social ascendente; o la marcada división del mercado inmobiliario entre Gangnam y Gangbuk. La audiencia coreana identifica fácilmente las connotaciones del texto, pero no siempre se transmiten a los espectadores globales.

La serie de JTBC “My Liberation Notes” (2022) narra la historia de unas personas que sueñan con escapar de sus monótonas vidas y muestra escenas bebiendo soju con familiares o amigos. Este licor destilado que suele venderse en botella verde es una frecuente metáfora de los dramas coreanos para mostrar la vida de la gente común.
ⓒ JTBC



Exponer temas sociales
Dirigido por Yeon Sang-ho, el K-drama “Hellbound” (2021) producido por Netflix incluye una sutil narrativa cultural. El protagonista Jeong Jin-soo (interpretado por Yoo Ah-in) es el líder de un culto religioso con muchos seguidores. A pesar del enorme apoyo emocional y financiero que recibe, Jeong vive en viviendas dilapidadas, unos dormitorios baratos llamados gosiwon. La escena en la que presenta esto a los detectives sorprendería a los espectadores coreanos como poco probable e inesperada, pues resulta inconcebible que el líder de un culto religioso con inmensa riqueza viva en un alojamiento tan barato e indeseable.

En origen eran alojamientos baratos para estudiantes de exámenes estatales, pero con el tiempo los gosiwon se han convertido en el último recurso de los marginados económicos. En el mejor de los casos, ofrecen condiciones de vida insatisfactorias: sus diminutas habitaciones generalmente no tienen ventanas y miden como 2 pyeong (6,6 metros cuadrados) con varios inquilinos que comparten cocina, ducha y váter. Si traducimos el término “gosiwon” simplemente como “allí”, se pierden todos los matices y detalles del significado cultural. Según la cultura de destino, gosiwon a veces se traduce como “dormitorio de estudiantes”, pero en realidad, en vez de alumnos albergan a trabajadores de bajo salario.

En “All of Us are Dead”, una serie de zombis de Netflix de 2022, los estudiantes se dirigen a sus compañeros de clase como “número uno” o “presidente”, en vez de usar sus nombres, como hacen los estudiantes coreanos en la vida real. Los más adinerados llaman burlonamente “beneficiario” a algún compañero de clase, en alusión a su desfavorecida familia que se beneficia del subsidio básico. Sobrevivir a la escuela secundaria en Corea es tan atroz y competitivo como soportar un ataque zombi.

La originalidad y el potencial de los K-dramas pueden provenir de su valentía para enfrentar estos problemas sociales, pero poner al descubierto los problemas sociales requiere conocimiento y experiencia. Las traducciones que expresan esa narrativa con sutileza y precisión permiten a los espectadores globales experimentar y disfrutar más plenamente los K-dramas.

En “My Mister” (emitida por tvN en 2018), la protagonista (interpretada por Lee Ji-eun) vuelve a casa en el metro tras un duro día de trabajo. Según la corporación del metro de Seúl, inculso antes del COVID-19, vagones y estaciones de metro eran frecuentemente usados para filmar series de televisión.
Cortesía de STUDIO DRAGON

Kang Yu-jungProfesora, Dpto. de Contenido Cultural Coreano-Inglés, Universidad de Kangnam; Crítica de cultura pop

전체메뉴

전체메뉴 닫기