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2021 SUMMER

Narrativas femeninas: una nueva ola en el cine coreano

EN LA CRESTA DE LA OLA

A lo largo de la historia del cine coreano, durante algo más de un siglo, las mujeres han sido relegadas en gran medida a la periferia, tanto delante como detrás de la cámara. Ahora, una legión de directoras gana reconocimiento con producciones que ofrecen su propia perspectiva del mundo. Yim Soon-rye, Byun Young-joo, Jeong Jae-eun, Kim Cho-hee y Kim Bo-ra, son algunos de los nombres destacados que brillan en el pináculo de esta marea creciente.

YIM SOON-RYE : conectar con la audiencia

Yim Soon-rye tiene una larga y prolífica carrera como directora de cine, algo poco común en Corea. También ha sido una activa defensora de las mujeres en el cine, y se ha afianzado como simbólica representante del sector.

La directora Yim Soon-rye con el equipo de producción de “Little Forest” (2018). Yim se estrenó como directora en 1994 con el cortometraje “Promenade in the Rain”. Es la sexta directora del cine coreano. © MEGABOXJOONGANG, INC, PLUSM

 

“Forever the Moment” (Yim, 2008) se basa en la historia real de la selección nacional de balonmano femenino de Corea y su impresionante actuación en los JJOO 2004 de Atenas, éxito sorpresa en taquilla que catapultó a Yim al mainstream. © Little Big Pictures

Yim Soon-rye trabaja en la posproducción de su últi¬ma película, “The Point Men”. Basada en la his¬toria real de los misioneros cristianos surcoreanos tomados como rehenes en Afganistán en 2007, la cinta se centra en la misión de un diplomático y un agente especial para rescatar a los rehenes secuestrados en Oriente Medio. A pesar del inesperado revés del COVID, Yim logró filmar unas escenas esenciales en Jordania el año pasado. Todo salió bien, tanto que se preguntaba si no habría agotado toda la buena suerte de la producción.

Esta película de acción y crimen se aparta de sus traba¬jos anteriores. Al contar con estrellas masculinas en papeles principales, sintió que había menos espacio para un enfoque feminista. “Cada vez que asumo un nuevo proyecto, intento no presentar personajes similares a mis trabajos anteriores, y eso volvió a confirmarse en esta película”, comenta.

La filmografía de Yim se caracteriza por su diversidad. “Three Friends” (1996), su primer largometraje, trata de tres jóvenes que luchan por abrirse paso en la sociedad tras la escuela secundaria; “Waikiki Brothers” (2001) se fija en una banda de músicos que vaga de un lugar a otro dando conciertos en clubes nocturnos; “Forever the Moment” (2008) se basa en la historia real de la selección nacio¬nal de balonmano femenino de Corea; “Whistle Blower” (2014) dramatiza hechos reales del fraude con experimen¬tos de clonación de células madre humanas de un profesor; y “Little Forest” (2018) es una idílica pieza sobre una joven que regresa a la casa rural de su infancia para comenzar de nuevo, lejos del ajetreo y el bullicio de la ciudad. Entre tan dispares temáticas, ha participado en la producción de varias películas sobre derechos humanos.

Desde que su primer corto en 1994, “Promenade in the Rain”, obtuvo el gran premio en el Festival Internacional de Cortometrajes de Seúl, la obra de Yim ha continuado expan¬diéndose y profundizándose como resultado de sus incesan¬tes esfuerzos por hallar un punto de conexión entre sus pelí¬culas y el público. Afirma que, tan importante como mante¬ner cierto estándar creativo, es obtener popularidad.

“Mis dos primeras películas, ‘Three Friends’ y ‘Wai¬kiki Brothers’, vendieron menos de 150.000 entradas jun¬tas, pero ‘Forever the Moment’ me abrió los ojos al poten¬cial comercial”, afirma Yim. “Desde entonces, he intentado mantener un equilibrio entre el mensaje y la popularidad. Al menos debo recuperar el coste de producción para hacer la próxima película”.



“Forever the Moment” sigue siendo su película más conocida, por superar importantes potenciales contratiem¬pos. Aunque habla de balonmano, un deporte impopular, y las protagonistas son una divorciada y una madre, la pelícu¬la fue un éxito sorpresa en taquilla, al atraer a más de cuatro millones de espectadores. Yim atribuye su éxito a la “meti¬culosa planificación”, y da todo el crédito a la producto¬ra Shim Jae-myung (también conocida como Jamie Shim), directora ejecutiva de Myung Films. Como fundadoras de Women in Film Korea, juntas han desempeñado un rol pio¬nero en la defensa de derechos e intereses de las mujeres en la industria cinematográfica.

“En 1999, varias cineastas, incluida Shim, Byun Young-joo y yo, nos reunimos en el Festival Internacional de Cine de Busan y surgió la idea”, explica Yim. “Pensamos que necesitábamos una organización para dar más oportunidad a las aspirantes a cineasta, y para defender los derechos de las mujeres en el sector”.

Women in Film Korea fue lanzada oficialmente en abril de 2000. Ha publicado un diccionario de mujeres cineas¬tas, ha producido el documental “Keeping the Vision Alive: Women in Korean Filmmaking” (2001) y organiza un festi¬val para mujeres cineastas al final de cada año.

Al preguntarle qué piensa de la escena cinematográfi¬ca coreana actual como directora destacada, Yim comenta: “Veo la sensibilidad de las jóvenes directoras emergentes y las historias que cuentan con luz optimista. Dicho esto, tam¬bién veo limitaciones, pues sus esfuerzos no se traducen de inmediato en mayores oportunidades. Pero en el último par de años, las películas de mujeres han sido más diversas y sin restricciones”.

Agrega que el antagonismo contra las películas femi¬nistas persiste, como reflejan los hombres “que delibera¬damente dan bajas calificaciones a esas películas”, pero cree que la expansión del mercado de streaming OTT trae¬rá más oportunidades a las directoras. “Quiero ver y hacer películas con personajes que, al margen del género, vivan sus vidas sin miedo ni pavor como seres humanos”, agrega. Obviamente, ese es el mundo con el que sueña.

“He intentado mantener equilibrio entre el mensaje y la popularidad”.

Lee Eun-sun Periodista de cine

BYUN YOUNG-JOO : Cineasta con un ávido fandom

En los ‘90, mucho antes de llamar la atención de los espectadores por su actitud franca y directa en programas de televisión, Byun Young-joo se hizo un nombre como directora feminista. Aunque es inusual para una cineasta nacida en los ‘60, tiene un sólido fandom.

La Directora Byun Young-joo durante la entrevista en un café de Yeonhui-dong, Séul, a finales de abril. Comenzó su carrera en los ‘90, con und trilogía de documentales sobre las “mujeres de comfort” vítimas de esclavitud sexual durante el japón imperial. © Han Sang-mooh

Con “Helpless”, un thriller psicológico, Byun ganó el premio al Mejor director en los 48º Baeksang Arts Awards, y Kim Min-hee el premio a la Mejor actriz en los 21º Buil Film Awards. © CJ ENM

Byun Young-joo es una directora veterana con muchas películas en su haber, incluida una trilo¬gía de documentales: “The Murmuring” (1995), “Habitual Sadness” (1997) y “My Own Breathing” (1999), que investigan la historia de las “mujeres de confort” que, cuando eran niñas, fueron forzadas a la esclavitud sexual por el Ejército Imperial Japonés durante la Segunda Gue¬rra Mundial. “Ardor” (2002), retrata los precarios deseos de una mujer casada de mediana edad; “Flying Boys” (2004), habla de la mayoría de edad de unos alumnos de último año de secundaria; y “Helpless” (2012), es un thriller psicoló¬gico sobre una joven que roba la identidad de otra persona para ocultar su pasado y cambiar de vida.

Su trilogía sobre las mujeres de confort atrajo gran atención en los principales festivales de cine extranjeros.
Tras la primera entrega, “The Murmuring”, lanzada en 1995, con frecuencia escuchaba a la gente decir: “No he visto la película, pero te respeto”. Solo vendió 4.800 entra¬das en todo el país. Algunos reporteros escribieron crí¬ticas sin ver la película, asumiendo que era una historia más sobre las mujeres de confort. Cuando algunos de mis colegas senior hicieron comentarios críticos, al principio me enojé y pensé: “¡Cómo te atreves a hablar así sin saber cuánto esfuerzo puse en ello!” Pero pensando en sus crí¬ticas, reflejé sus consejos en las siguientes entregas, cam¬biando mi orientación, como si las abuelas se entrevistaran entre sí.

Su primer largometraje, “Ardor”, mostraba a una joven ama de casa teniendo mero sexo con un vecino tras cono¬cer la aventura de su marido. Pudo resultar controverti¬do.
Cuando se corrió la voz de que preparaba un largometra¬je, llegaron un montón de propuestas para una película de mujeres de confort. Las rechacé todas. Mis 10 años como cineasta independiente me pesaban y quería hacer una pelí¬cula que la gente viera de todos modos.

Debió preocuparle cómo representar esa escena de sexo.
Pensé que era importante hacer justicia a la narrativa feme¬nina de la novela original de Jon Kyong-nin, “Once in a Lifetime Day”. Lo que más lamento ahora de la escena de sexo es que estaba demasiado centrada en lo que no podía filmar: realmente no pensé en cómo quería filmarlo. En ese sentido, es una escena “defensiva”. Después seguí pre¬guntándome y comprendí que habría sido mejor si hubiera expresado lo que quería, en vez de pensar tanto en lo que no podía hacer. He de pensar en lo que quiero hacer y luego preguntarme si está bien, pero entonces no pude hacer eso.

Hubo una larga pausa entre “Flying Boys” y “Helpless”.
Me apasionan tanto la ficción como las películas de géne¬ro. Después de “Flying Boys”, me pregunté: “¿Por qué hay tanta distancia entre lo que me gusta y lo que hago?” En un viaje a Gyeongju leí la novela “All She Was Worth”, de la escritora japonesa Miyuki Miyabe. Luego compré los dere¬chos de la película. Mi adaptación cinematográfica, “Hel¬pless”, se centra en lo que convierte a una mujer corriente en un ser inhumano. Entonces el productor me dijo: “No te esfuerces demasiado en inyectar un mensaje significativo o moral en la historia. Se proyectará sin querer en la pelícu¬la”. Comprendí lo que quería decir mientras filmaba.

Obviamente, piensa que una buena narrativa feminis¬ta o un buen personaje femenino no tienen por qué ser políticamente correctos.
Me gustaría ver más personajes femeninos, ya sean pasi¬vos o activos, con una narrativa independiente, al margen del tiempo que salgan en pantalla. He señalado la pasividad de los personajes femeninos por la plétora de películas que objetivan a las mujeres sin darles una narrativa sólida. No tengo ningún problema con los personajes pasivos per se. Al margen del género del director, hace falta un espectro más diverso de historias de mujeres.

“Al margen del género del director, hace falta un mayor espectro de historias de mujeres”.

Im Soo-yeon Reportera, Cine21

JEONG JAE-EUN : Formas de transmitir el dolor

El debut cinematográfico de Jeong Jae-eun en 2001, “Cuida a mi gato”, se anticipó mucho al auge de la narrativa de mujeres en el cine coreano. Solo eso ya le asegura un lugar en el linaje de directoras.

“Intento no irme a los extremos al retratar el sufrimiento o el deseo de un personaje”.

Jeong Jae-eun en una entrevista tras lanzar su documental de 2013 “Talking Architecture: City Hall”, que analiza la construcción del nuevo ayuntamiento de Seúl. © Cine21

“P robablemente, no habrá una sola mujer que haya estudiado cine que no haya sido influida por ‘Cuida a mi gato’”, dijo una vez una directo¬ra incipiente. Y es cierto que las prominentes directoras actuales de Corea alimentaron sus sueños con tan innova¬dora cinta. Esta película sobre la mayoría de edad capta con delicadeza los dolores de crecimiento de cinco jóvenes mujeres que intentan hallar su lugar en el mundo.

Aunque inicialmente fue un fracaso de taquilla, logró fanáticos devotos que hicieron campaña por una segunda carrera teatral. Fue invitada a muchos festivales de cine en el extranjero, incluidos el Festival Internacional de Cine de Rotterdam y el Festival Internacional de Cine de Ber-lín, donde fue muy bien recibida. The Guardian incluyó la película entre los 20 principales clásicos del cine moderno de Corea del Sur. Jeong actualmente trabaja en un estreno remasterizado de la película para su 20º aniversario.¿Por qué una historia sobre mujeres de 20 años como ópera prima?
Parecía una progresión natural para mí, al haber hecho cor¬tos sobre una niña de escuela primaria y otra de secundaria. En retrospectiva, la película fue casi un milagro. La esce¬na cinematográfica coreana entonces era más receptiva a esfuerzos innovadores, y los anuncios de televisión en telé¬fonos móviles despertaron mayor interés en los personajes femeninos jóvenes. Esa combinación de factores hizo posi¬ble la película.

Aunque no fue tan bien en taquilla, atrajo a una leal base de fans.
La audiencia era diversa y en realidad había más fans mas¬culinos al principio. La hostilidad de los hombres hacia las películas feministas no era tan frecuente entonces. El público masculino se identificó con las luchas de las prota¬gonistas femeninas, y la mayoría de las mujeres no quería ver una película que les recordara la cruda realidad de su vida.

¿No decepcionó a esos fans su siguiente largometraje, “The Aggressives” (2005)?
Cuando la gente me preguntó por qué había elegido una his¬toria de hombres, me quedé perpleja. Las directoras deben poder retratar a los hombres con una luz adecuada y vicever¬sa. Las películas que vi mientras crecía no necesariamente carecían de representación de mujeres, pero los directores masculinos retrataban los personajes femeninos con situa¬ciones dolorosas, física y sexualmente. Esa podría ser una intención cinematográfica para agitar la emoción del espec¬tador, al mostrar un dolor crudo. Pero, personalmente, no tiendo a la descripción directa de personajes que transitan por el dolor. Intento no irme a los extremos al retratar el sufrimiento o el deseo de un personaje.

Escena de “Cuida a mi gato” (2001), que capta el dolor de crecimiento de cinco mujeres jóvenes que intentan hallar su camino en el mundo tras graduarse en una escuela vocacional. Catalogada como primera película femenina sobre la mayoría de edad del cine coreano. © CJ ENM

¿Cómo llegó a dirigir el documental “Beast”, parte de la serie “KBS Archive Project: Modern Korea”?
KBS me preguntó si estaría interesada en contar una histo¬ria sobre mujeres. Hasta entonces, todos los episodios de la serie “Modern Korea” habían sido dirigidos por hombres.

¿Cree que la actitud de los cinéfilos ha cambiado en los últimos 20 años?
Es un cambio significativo que las mujeres jóvenes de hoy sean más receptivas a las obras de escritoras y directoras. Creo que el creciente respeto por sí mismas y la autoesti¬ma de las mujeres han generado este cambio. En ese senti¬do, alienta ver cada vez más protagonistas femeninas que no temen ser francas en sus deseos. Espero que este cambio en el mundo ficticio se extienda al mundo real.

Im Soo-yeon Reportera, Cine21

KIM CHO-HEE : La felicidad de la autoliberación

“Lucky Chan-sil”, la ópera prima de Kim Cho-hee en 2019, retrata a Chan-sil, una vivaz mujer soltera de unos 40 años que habla un dialecto local que de pronto se queda sin trabajo. La protagonista femenina se parece a la directora.

La directora Kim Cho-hee habla con los actores en el set de “Lucky Chan-sil”, basada en su propia experiencia como productora de cine. Tan alegre comedia fue un éxito tanto cualitativo como para la audiencia. © Challan Film

Hay cierto tipo de personas con las que te encuen¬tras a menudo en el mundo real, pero casi nunca como protagonistas en la pantalla. Chan-sil es un buen ejemplo: tiene unos 40 años, sin marido ni hijos, y recientemente perdió su trabajo. ¿Quién querría hacer una película sobre una mujer así?

“Lucky Chan-sil” cambia alegremente este prejuicio. Todo empieza cuando la productora de cine Chan-sil se queda repentinamente sin empleo. Pero en vez de desespe¬rarse, sigue adelante y comienza a trabajar como asisten¬ta de una joven actriz, una amiga cercana. Por el camino, un pequeño romance entra en escena por primera vez en su vida.

Chan-sil es el alter ego de Kim Cho-hee. “Escribí el tipo de historia que mejor se me da y el personaje sim¬plemente surgió”, explica Kim. Su carrera cinematográfi¬ca comenzó como integrante del equipo de producción de “Night and Day” (2008), del director Hong Sang-soo, en un rodaje en París, mientras estudiaba teoría del cine en la Université Paris 1 Panthéon-Sorbonne. Continuó trabajando como productora en películas de Hong por varios años, pero inesperadamente se quedó sin trabajo y no sabía qué hacer. Finalmente, logró levantarse y escribir el guión de “Lucky Chan-sil”.

Kim sintió una gran diferencia en la recepción de la película entre la industria y el público. “Cuando presenté el guion a los inversores para obtener financiación, la respues¬ta más común fue: el mayor problema del guion es Chan-sil”, recuerda. “Pensaron que la historia era demasiado personal. En cambio, el público se enamoró del personaje. Quizá los cinéfilos sean el grupo menos conservador”.

En vez de destacar los logros profesionales de Chan-sil, Kim decidió centrarse en su espíritu obstinado e indepen¬diente. Chan-sil resalta en la película: “Es importante soñar no solo con independencia financiera, sino también con independencia emocional”. La película habla de hallar pla¬cer en las pequeñas cosas de la vida y de la alegría de revi¬vir un sueño hace tiempo olvidado.

“Así era yo hasta mis 30 años. Estaba demasiado empe¬ñada en el éxito y en ganar a otros. Pero un día comprendí que no estaba hecha para eso. Lo vi aún más claro cuando no pude encontrar trabajo como productora y toqué fondo. Quería transmitir a la audiencia lo verdaderamente libe-rador que es soltar las ambiciones fuera de tu alcance”, recuerda Kim.

“Lucky Chan-sil” se estrenó en marzo de 2020, cuan¬do los cines estaban muy afectados por la pandemia. Pero, como el mensaje de la película, Kim decidió seguir ade¬lante. La cinta tuvo una exitosa carrera para una película independiente, y atrajo a unos 27.000 espectadores. Kang Mal-geum, en el papel principal, fue premiada como mejor actriz revelación en los principales festivales de cine del país.

Escena de “Lucky Chan-sil”. Tras perder su trabajo la protagonista se muda a una habitación alquilada en una colina. Su espíritu tenaz resonó cálidamente entre el público.

Otro elemento clave en la narrativa de la película es la amistad entre Chan-sil y la dueña de su pensión, interpre¬tada por Youn Yuh-jung. Kim conoció a Youn en el set de “Hahaha” de Hong Sang-soo (2010) y mantuvo una rela¬ción cercana con ella. La actriz accedió gustosa a protagoni-zar “Ladies of the Forest” (2016) sin cobrar, un cortometra¬je que Kim hizo con el apoyo del Ulju Mountain Film Festi¬val, tras una pausa de un año en Canadá.

Tras ganar el Óscar a la Mejor actriz de reparto por su papel en “Minari” (2020) del director Lee Isaac Chung, Youn a menudo invitaba a Kim a comentar, pues había tra¬bajado con ella en muchos proyectos.

“Me siento casi como su portavoz. No sé si me corres¬ponde hablar de una actriz tan distinguida”, resalta Kim. Pero incapaz de ocultar su afecto, continúa, “Youn es una actriz persistente que demuestra que la suerte no tuvo nada que ver en la altura profesional alcanzada. Nunca la he visto equivocarse en una sola línea. Ha tenido muchos giros vita¬les, y su actuación ofrece una perspectiva extraordinaria”.

“Prefiero las películas que muestran la perspectiva del director a las que ofrecen un puro disfrute dramático”, resalta Kim.

“Quería transmitir a la audiencia lo verdaderamente liberador que es soltar las ambiciones que están fuera de tu alcance”.

Lee Eun-sun Periodista de cine

KIM BO-RA : La narrativa personal ilumina una era

“House of Hummingbird”, ópera prima de Kim Bo-ra en 2018, investiga cómo una narrativa individual puede iluminar tiempos y aspectos de una sociedad. Con más de 60 premios en festivales nacionales y extranjeros, catapultó a su directora al centro de atención.

Durante una entrevista en 2019, Kim confesó su intención de que “House of Hummingbird” fuera una “carta de 1994” enviada a la gente de hoy. © Jang Sung-yong

“Las películas dirigidas por mujeres a menudo se agrupan aunque todas somos muy diferentes”.

Estreno de la directora Kim Bo-ra, “House of Hummingbird”, revisita una época desde la perspectiva de Eun-hee, de 14 años. © ATNINE FILM CO., LTD; EPIPHANY FILM; MASS ORNAMENT FILMS

“House of Hummingbird” está ambientada en 1994, año de dramáticos acontecimientos que incluyen la muerte del líder norcoreano Kim Il-sung en Pyongyang y el colapso del puente Seongsu en Seúl. A través de los ojos de la estudiante de secundaria Eun-hee, el mundo es una compleja red de dinámicas, de conflictos familiares y laborales.

¿Qué dificultades tuvo para rodar “House of Humming¬bird”?
Envié mi propuesta a ocho o nueve inversores. La mayoría dijo que un estudiante de secundaria como líder no funcio¬naría. Y muchos en mi entorno también me preguntaron por qué era tan importante incluir el colapso del puente Seong¬su como trasfondo de la historia.

¿Por qué una estudiante de secundaria?
La llamada “enfermedad del segundo año de secundaria”, a menudo traducida como “síndrome del alumno de octavo grado” en países de habla inglesa, es un fenómeno univer¬sal. Los 14 y 15 años son un periodo incómodo de la vida, entre la niñez y la edad adulta, cuando recién empiezas a abrir los ojos al mundo. En la escuela secundaria te inun¬da tanta información nueva que resulta difícil asimilarla, te sientes confuso y perdido. En secundaria socializas más y adquieres un “color protector”; a los 20 ese color se con¬vierte en tu identidad, y a los 30 se vuelve sólido como una roca. Por eso la protagonista tenía que ser una alumna de secundaria.

Pero tenía una idea clara de cómo no quería que fuera el personaje. En las películas dirigidas por hombres, las chicas de secundaria o preparatoria tienden a ser sexualizadas, de apariencia bonita y falda corta, y se portan demasiado bien con los hombres de mediana edad. Se las retrata como ino¬centes que ríen por tonterías, pero las chicas de secundaria que veo a mi alrededor son bien distintas. Por eso quería crear un personaje que fuera un ser humano tridimensional, con emociones complejas.

¿Cuál fue la respuesta a la película en festivales interna¬cionales de cine?
En el Festival Internacional de Cine de Berlín, la gente me dijo que, pese a ser una cinta larga, eso apenas se percibía gracias a su ajustada trama. Y en el Festival de Cine de Tri¬beca fui recibida con entusiasmo al ser el primer largome¬traje dirigido por una coΩreana que competía en la sección de Mejor Largometraje Narrativo Internacional. La película recorrió el circuito mundial de festivales en 2018, cuando la industria cambiaba hacia un mayor equilibrio de género a raíz del movimiento Me Too. Fuimos bien recibidos y los medios extranjeros publicaron artículos presentando traba¬jos de directoras coreanas como parte de una nueva ola en el cine coreano.

¿Cree que la narrativa personal de una joven puede ser¬vir como ventana a la sociedad y la política coreanas?
A la gente le gusta poner etiquetas como “feminismo” o “solidaridad entre mujeres” a la cinta, pero no la rodé con eso en mente. Soy feminista, por tanto intuyo que inevita¬blemente elementos feministas se filtraron en la película.

¿Le importa que la llamen directora “mujer” y que su película se defina como obra de “mujer directora”?
Las películas dirigidas por mujeres a menudo se agrupan aunque todas somos muy diferentes. Pero no espero que eso cambie pronto. Al haber existido escasez de narrativas cen¬tradas en mujeres, por ahora no hay más remedio que lla¬mar la atención destacando la diferencia con las narrativas de los hombres.

Quiere hacer una película de guerra con perspectiva femenina. ¿Por qué?
Desde la mitad de mi veintena siento interés por la guerra. Conocer los actos de brutalidad cometidos por el ejército de Corea del Sur durante la Guerra de Vietnam me hizo pensar en la peculiar posición de las mujeres de una nación perpe¬tradora. También siento que la guerra no se ha tratado ade¬cuadamente en nuestra sociedad. Para llegar al origen del dolor del pueblo coreano, tenemos que volver a la Guerra de Corea.

Trabaja en una película de ciencia ficción titulada “Spectrum”, basada en la novela de Kim Cho-yeop.
Hay películas de ciencia ficción como “Interstellar” que se basan en el conocimiento científico, y otras que toman pres¬tado el género para plantear preguntas sobre lo que significa el ser humano. “Spectrum” es más de este tipo. Ahora estoy escribiendo el guion, con el objetivo de empezar a rodar el año que viene.

Im Soo-yeonReportera, Cine21

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